CANAL PERRO |
La
exposición La No Comunidad, que permanecerá abierta al público en
CentroCentro Cibeles desde el viernes 26 de octubre al 27 de enero, ofrece una
mirada poliédrica a la idea de la soledad y el desarraigo a partir de las obras
de casi 60 artistas nacionales e internacionales escogidos por su especial
calidad y relación con la temática propuesta. La muestra, comisariada por
Blanca de la Torre y Ricardo Ramón Jarne, aborda la soledad desde el
cuestionamiento de la idea de comunidad, de esa no comunidad que tiene que ver
con la ruptura del vínculo social en la sociedad actual.
CINDY SHERMAN |
La
celebración de esta muestra se enmarca en un plan pionero del Ayuntamiento de
Madrid que, bajo el lema ‘Madrid te acompaña’, aborda la lucha contra la
soledad no deseada desde la cultura, la formación y la salud.
El recorrido
no está planteado de modo lineal, se propone de manera reversible, pudiendo
partir desde el Gabinete Central de Espejos y Retratos. El espejo obliga al
espectador a formar parte de la exposición y el autorretrato opera como una
suerte de espejo creado por el propio artista.
JORGE MOLDER |
Para la
exposición se han seleccionado obras con espejos de destacados artistas como Pilar
Albarracín, Rafael Lozano-Hemmer, Mona Hatoum, Jorge Perianes, Mitsuo Miura y
Marina Núñez. Estos dialogan en la sala con una serie de retratos y
autorretratos de autores como Alberto García-Alix, John Coplans, Miguel Ángel
Gaüeca, Jorge Molder, Antonio Saura, Luis Gordillo, Cindy Sherman y Darío
Villalba.
Ciudad contemporánea
A partir de
ahí, uno de los ámbitos de la muestra desarrolla el tema en relación a la
‘Ciudad Contemporánea’, a través de personajes de todo tipo, desde vagabundos e
indigentes a diferentes clases de outsiders y comunidades marginales que
demuestran cómo son pocos los rincones del globo donde no encontremos las
consecuencias del capitalismo en forma de soledad.
PHILIP-LORCA DI CORCIA |
Una mujer
atraviesa las calles de Nueva York en la fotografía de Paul Graham, que forma
parte de una serie más amplia, American Night, que reflexiona sobre la fractura
del sueño americano. También Mona Hatoum se interesó por las desigualdades
sociales a través de Roadworks, resultado de una performance arrastrando sus
pies desnudos en una comunidad marginal de Brixton, mientras Pierre Gonnord
busca seres anónimos de las grandes urbes en las fotografías de las series
Regards y Utópicos.
BORIS MIKHAILOV |
Los tres
artistas siguientes se enmarcan en la misma línea pero en contextos diferentes:
Esko Männikkö, Zhang Huan, Boris Mikhailov. En el primer caso retratando los
interiores pobres de ciudades del norte de Finlandia, denunciando las
condiciones de los retretes públicos de China en el caso de Huan y en el caso
de Mikhailov retratando los más desfavorecidos de Ucrania.
La
prostitución en las calles urbanas está presente a través de las fotografías de
Philip-Lorca Dicorcia y Trine Søndergaard. En el primer caso fotógrafo retrata
hombres que ejercen la prostitución en
los alrededores de Santa Mónica, Los Ángeles, mientras Søndergaard presenta
desgarradoras imágenes de prostitutas del distrito rojo de Copenhague.
ANTONIA WRIGHT |
La
incomunicación y deshumanización se ven también en el vídeo de Antonia Wright,
Are you OK? , como resultado de una serie de performances realizadas en La
Habana, París y Nueva York, en las que la artista llora en mitad de la calle en
un intento de captar la atención del viandante. Próxima a ésta, la tensión
emocional de una madre que mira a través de la ventana mostrando un instante de
soledad familiar, con la característica intensidad psicológica de las
fotografías de Gregory Crewdson.
Inmigración, género, identidad
La serie de
Jürgen Klauke Transformer, va dando pistas sobre el siguiente capítulo. El
artista explora estereotipos asociados a la masculinidad a través de mostrar su
propio cuerpo en un acto de transformismo, para buscar una indefinición que se
sitúe en las fronteras del binomio masculino-femenino. Funciona ésta como
transición hacia el ámbito de ‘Frontera’ que se explora en las siguientes salas
desde varios ángulos: inmigración e ideología, pero también género e
identidad.
Richard
Prince explora una supuesta identidad masculina con sus Cowboys, al apropiarse
de la icónica imagen del vaquero de los anuncios de Marlboro. Esta imagen de
hombre solitario y fuerte aparece enfrentada a la de Girlfriends, donde una
serie de guapas mujeres posan como trofeos en un gesto de hiperbólica crítica
hacia los roles de género en la actual sociedad heteropatriarcal.
LILIANA PORTER |
Un
heteropatriarcado que se escenifica en la fotografía de Eva Lootz, donde una
mujer va tejiendo la propia indumentaria que viste en Ella vive en el traje que
se está haciendo, de modo similar al de la mujer de avanzada edad de la
diminuta escultura de Liliana Porter.
Otras
artistas lo muestran a través de su propio cuerpo, donde género, identidad y
religión se interrelacionan, como Marina Abramovic y la estrella de cinco
puntas que rasga en su estómago, que también es desgarrado a través de un aro
de espinas en el vídeo de la israelí Sigalit Landau bailando el hula-hop.
SHIRIN NESHAT |
Problemáticas
similares en torno al género y la identidad se centran en el caso de Shirin
Neshat en países musulmanes desarrollando relatos de claros tintes
autobiográficos que retratan la dureza de la situación de la mujer en la
sociedad islámica.
REGINA JOSÉ GALINDO |
En el caso
de Regina José Galindo la soledad de la condición femenina sometida a
diferentes formas de poder y dominio se retrata a través de la performance de
la artista corriendo delante de un tanque. El tono de humor aquí lo ponen Elena
del Rivero, homenajeando a Marcel Duchamp jugando al ajedrez con una mujer desnuda,
las piernas de la fotografía de Helena Almeida y las de la muñeca de Laurie
Simons atrapadas en un libro.
Periferia
Este
concepto se sitúa en el proyecto como contrapunto a la ciudad. Nos encontramos
con la soledad del “afuera”, lo ajeno al centro, o los distintos puntos de fuga
asociados a éste: desde el abandono de lo rural, hasta los diferentes entornos
aislados como lo insular, el espacio o el mar.
VASCO ARAUJO |
Desde el
astronauta en el espacio de Joan Fontcuberta hasta el hombre en el fondo del
mar de Simon Faithfull. De la mujer en un entorno difícilmente localizable,
posiblemente algún no-lugar de la Irlanda del Norte de la fotografía de Willie Doherty al vídeo de Vasco Araujo en
que una isla se presenta como metáfora del ser humano, donde la soledad impulsa
a un hombre a aprender el lenguaje de los pájaros. En el caso de Lucía Loren,
los protagonistas son pastores nómadas de la zona liberada del Sáhara, que
tratan de habitar y mantener una cultura en extinción. El castigo de Atlas de sostener en soledad el
peso del mundo, de la obra de Vik Muniz, abre capítulo al castigo como
reclusión forzosa de las obras de Gonzalo Elvira, Artemio y Nuria Güell. En la
obra de Nuria Güell se escucha la conversación de la artista con un preso.
Gonzalo Elvira se inspira en la reclusión del anarquista Simon Radowitzky en la
conocida como “prisión del fin del mundo”, y Artemio muestra una instalación de
grabados junto con el audio de un coro de presos de la cárcel de Lecumberri,
México.
Obras específicas
El recorrido
anterior se pone en diálogo en las diferentes secciones con las obras
específicas de artistas a los que se han comisionado obras ex-profeso para la
exposición, y que de un modo u otro ofrecen soluciones o miradas alternativas
ante esta problemática:
Con un tono
humorístico, la propuesta de Eugenio Ampudia toma como base dos de las
alternativas comunitarias que más han proliferado en los últimos años: los
huertos urbanos, y la adopción de animales de compañía en refugios de animales.
Los visitantes pueden disfrutar tanto de las tareas del huerto como de los
animales por vía telemática, llevándose a cabo todas las tareas en torno a
ellos a través de canales OTT de Internet.
Cristina
Lucas realiza su obra deliberadamente en una pequeña sala de tránsito, forzando
al espectador a atravesar unas vallas publicitarias con “slogans” seleccionados
entre aquellos que han logrado convertirse en algo más que la enunciación de
los productos que difunden. La obra de
Lucas busca una llamada de conciencia de la existencia de una soledad asociada
al neoliberalismo y económicamente muy rentable.
La
Instalación de Concha Jerez reflexiona sobre la soledad del individuo que se
desarrolla en privado, con un carácter de sistematicidad, acciones que son
reflejo de algunas de sus formas de actuar en el mundo. Estos soliloquios,
diseminados en acciones realizadas por la artista y registradas mediante una
cámara de vídeo, dialogan con diversos lugares del edificio de CentroCentro así
como con la memoria y el pasado del lugar como edificio de correos.
FERNANDO SÁNCHEZ CASTILLO |
Fernando
Sánchez Castillo propone un homenaje a los emigrantes que han intentado llegar
a España, apelando a la imposibilidad de imaginar su soledad y la incertidumbre
en su travesía por el Mare Nostrum. La imagen de la que parte el proyecto es la
de un hombre subido en un poste de vigilancia, oteando un horizonte de vallas,
alambradas y sueños colectivos. Sánchez Castillo ha formalizado esta imagen a
través de una suerte de “Memorial”, compuesto por una escultura que se repite
en 857 pequeñas esculturas iguales, metáfora de la repetición de ese mismo
sueño de una vida mejor.
BASURAMA |
Finalmente,
en el exterior del edificio, el colectivo Basurama y Dagoberto Rodríguez,
cofundador del colectivo Los Carpinteros, colaboran por primera vez en la
realización de un “Refugio contra la soledad”. Tomando como base de inspiración
la idea de ermita como uno de los iconos del paisaje español, proponen la
construcción de este refugio como lugar de encuentro, íntimo, aunque abierto en
el que cualquiera puede entrar, dispuesto a ser abordado por cualquiera, para
charlar, comentar, lamentarse o reír. Una arquitectura de geometría compleja,
inspirada en los aviones espías que logran resultar invisibles para los
radares, que recibe al espectador con una atmósfera de sonidos urbanos y de luz
inspirada en el atardecer.